Nada salió como habíamos planificado, aunque esto no ha sido necesariamente malo.
Es cierto que estos dos años podríamos decir que han estado marcados por dos crisis: el temporal DANA y la pandemia de la Covid-19. Sin embargo, si echamos la vista atrás, la unión de todo Ontinyent es lo que verdaderamente ha definido estos dos años de legislatura. El Gobierno municipal al completo, los partidos de la oposición (Partido Popular y Compromís), así como todos y cada uno de nuestros vecinos y vecinas hemos sido una misma persona. En todo momento hemos puestos los intereses de Ontinyent por encima de cualquier interés político o partidista.
Ontinyent fue lo que nos llevó a querer aprobar por unanimidad el presupuesto municipal para 2021. Por primera vez en la historia lográbamos tal consenso porque, si bien es cierto que teníamos mayoría suficiente para aprobar el presupuesto municipal, quisimos contar con todos los partidos. La crisis económica, sanitaria y social que iba a provocar la pandemia requería una respuesta de ciudad y, por eso, dejamos a un lado nuestras legítimas diferencias. Ontinyent estaba (y estará siempre) por encima de ellas. Este mismo motivo nos llevó a contar con todos los grupos municipales, las asociaciones comerciales y de restauración, así como con los medios de comunicación locales y comarcales para impulsar la campaña "Queda’t a casa" a principios de 2021 o la coordinación con todos los agentes sociales y económicos para impulsar acciones como los Xecs Tornem Junts, Pla Tornem Junts o el Clúster Textil Sanitario. Siempre dijimos que la pandemia la superaríamos juntos y que recuperaríamos la normalidad todos y todas juntos.
Esta unión de ciudad la demostramos unos meses antes, durante el temporal DANA. La coordinación de los equipos de emergencia como Policía Nacional, Policía Local, Bomberos y Protección Civil evitó que la fuerza del agua se cobrara vidas humanas; el trabajo posterior del departamento de obras para recuperar la normalidad en tiempo récord, o la tarea del departamento de Servicios Sociales que se desplazó hasta el albergue Perú para atender y acompañar a las personas que habían tenido que abandonar sus hogares; el equipo de Alcaldía al completo junto con los concejales y concejalas, quienes también estuvieron en primera línea tratando de ayudar a toda la ciudadanía que necesitase cualquier información o ayuda. Recuerdo también con cariño la ayuda recibida de los medios de comunicación locales, que estuvieron en todo momento informando con rigor y con respeto de un temporal que nos dejó marcados. Y sobre todo, la solidaridad de la ciudadanía de Ontinyent, que se quedó en casa para facilitar el trabajo de la policía local y nacional durante los momentos más duros de la tormenta. Tampoco podemos olvidar las llamadas que se recibieron para ayudar a los vecinos y vecinas que tuvieron que abandonar sus hogares. La fuerza del agua que irrumpió en Ontinyent el 12 de septiembre sirvió para unirnos más como ciudad.
Hemos demostrado nuestra capacidad de resiliencia, nuestra unión ante la adversidad. Por eso, si hay algo positivo que nos han proporcionado estas dos crisis ha sido la unión que hemos demostrado como ciudad. A partir de ahora, estoy convencido que vendrán cosas buenas y aunque vengan malas, las volveremos a afrontar unidos porque somos una gran ciudad y tenemos a la mejor gente.
